lunes, 17 de enero de 2011

Mora (Toledo).

Hasta siete nevadas conté el pasado invierno de camino a Mora (Toledo). Cuando el invierno “se tuerce” en la llanura manchega es momento de abrigarse bien, y esperar con paciencia hasta que cambien las condiciones meteorológicas. Y es que ésta, es una tierra de largos inviernos y de veranos, más largos aún. La primavera y el otoño son tan sumamente efímeros que podríamos afirmar que sólo hay dos grandes estaciones. “Por lo menos, es lo que yo viví”…
Mora está situada en el centro mismo de la península ibérica, y aunque forma parte de la Mancha y de sus llanuras, también está a tiro de piedra de los Montes de Toledo. En el centro, pero lejos y a la vez cerca de todo.
Cuenta Mora con un antiguo castillo, llamado de Piedras Negras, que según dicen los que saben, formó parte de la dote de la mora Zaida. Castillo que como otros muchos palacios y fortificaciones de la época, antes de ser olvidados y derruidos por el tiempo, fueron ganados en la batalla. Gentes procedentes del norte expulsaron y dominaron a los que allí vivían en el nombre de otras creencias y otra religión. Ya saben, la historia del mundo está llena de conquistas y de reconquistas, en función de quién la cuente. Unas y otras gentes, venidas ahora de todas partes, hacen de este lugar, una tierra orgullosa de su antiguo mestizaje, que a la postre, es el camino trazado para todos los pueblos.
Pero si hay algo de lo que los morachos se sienten verdaderamente orgullosos es de su afamado aceite, de los más renombrados y de mejor calidad de Castilla la Mancha. Al aceite se dedican jornadas gastronómicas, fiestas con desfile y algún que otro monumento.
En la renovada Plaza de la Constitución, una placa de mármol luce el siguiente mensaje: “Donde son respetados los pájaros, las plantas y las flores, se vive vida civilizada”.

7 comentarios:

Abilio Estefanía dijo...

Hola Anzaga, totalmente de acuerdo con la inscripción de la placa.
En cuanto a lo de las estaciones... por aquí también decimos que tenemos dos estaciones: la de invierno y la del tren.

Un abrazo

Anónimo dijo...

Una estupenda presentación que nos da una clara idea de esta villa así como de la idiosincrasia de sus gentes...Esa placa dice mucho de ellas.

Besos

Benita

Gus Planet dijo...

Hola amigo enmascarado! Muy bonita tú presentación de una invernal Mora, y muy bueno el paralelo entre las culturas que nos presedieron y la actual, con toda su orgullosa producción de aceites ... tendré que conseguirlos, daría mi reino por unas cuantas botellas de ése verde elixir!

GUSPLANET

diminuto blog dijo...

Merece visita Mora aunque sea sólo por admirar su peculiar casa consistorial, de la cual muestras torre. Preciosa.
El aceite, y también su azafrán, son otros de sus atractivos.
Y no sólo el mejor acite de La Mancha, pues el de tantos pueblos Toledanos que no han sucumbido a las mezclas que se hacen en algunas cooperativas, puede considerarse entre los mejores del mundo, y dicho esto sin entrar en competencias, pues existen paladares y aceites para cada ocasión y comidas.

¿Nevará éste año?

Ángel Zamora dijo...

... "Paco amor estás hecho un mosquito malo"...

Ya sabía yo que me sonaba esa medioluto sobre dedo...


Abrazos discretos.


Merecemos por lo menos una nevada...diría yo.

Unknown dijo...

Hola a tod@s.
Os recomiendo que no os perdais la Fiesta del Olivo declarada de Interés Nacional. Se celebra, si no recuerdo mal, el último domingo de Abril. A destacar el Desfile de Carrozas y Carros engalanados, durante el cual podreis ver a sus participantes y muchísimos vecinos vestidos con los típicos trajes morachos.
Un saludo

Anónimo dijo...

Estas imágenes me hacen acordar muchísimo a cuando estuve en uno de los hoteles cinco estrellas en estambul, con sus calles, paisajes, edificios árabes. Son increíbles estas imágenes!!!

**** " NO SE PUEDE CONSERVAR AQUELLO QUE NO SE CONOCE " ****