Si en las lagunas de la llamada Mancha Húmeda, en estos días de inicios
de mayo con un poco de suerte, podemos deleitarnos con el ir y venir de los fumareles cariblancos, comunes y aliblancos, aquí, en la costa occidental marroquí, este nicho ecológico
lo ocupan los charranes.
Entre los charranes, la pagaza piquirroja, Hydroprogne caspia, es el mayor de todos. Del tamaño de una gaviota
media, vuela con habilidad sobre las aguas atlánticas en busca de pescado. Con
frecuencia se la encuentra acompañada de otros charranes, en estas fotografías
tomadas en Merja Zerga (Marruecos), las
podemos ver junto a un grupo de charranes
patinegros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario