jueves, 1 de noviembre de 2012

Palomas de asfalto.

 
 Si se han fijado con detenimiento en las Palomas de Ciudad, se habrán percatado que muchas de ellas cojean a causa de la pérdida de uno o varios dedos, e incluso, hay algunas que andan con los muñones pelados.  - La causa no es otra, que los hábitos adquiridos por esta especie a la hora de buscar el alimento. 
 
 Las Palomas de Ciudad, pasan horas y horas caminando sobre el duro asfalto y sobre las aceras en busca de los restos orgánicos que vamos dejando. - Las patas de las palomas no están hechas para caminar sobre estas superficies, sino por los campos de tierra blanda donde se esconden las semillas de las que ancestralmente se han venido alimentando. Definitivamente, este es el precio que tiene vivir en la jungla de asfalto de los hombres.


No hay comentarios:

**** " NO SE PUEDE CONSERVAR AQUELLO QUE NO SE CONOCE " ****