Me sorprendió ver esta gran culebra
de escalera (Rhinechis scalaris), sobre el asfalto de una calle de un pequeño pueblo manchego, tranquila como
estaba, ajena a las gentes del lugar. Al preguntar a los vecinos que andaban
por allí, me dijeron que este reptil tenía querencia en ese trozo de calle, y que
por lo tanto se la veía de vez en cuando en ese mismo sitio tomando el sol plácidamente.
La actitud respetuosa de los vecinos, no dejó de llamarme la atención, normalmente, y como yo había constatado en
demasiadas ocasiones, a los reptiles en España,
se les quita la vida a la mínima oportunidad. Pero evidentemente, este no era
el caso de esta afortunada culebra de
escalera.
Entonces, me comentaron que en este verano, los
topillos de campo volvían a ser una gran plaga, y que aún recordaban como unos
años atrás, una gran plaga de roedores acabó con todas las cosechas, y que en
definitiva, la culebra de escalera
es completamente inofensiva para el ser humano…