La Jara Pringosa, Cistus ladanifer.

 

Desde últimos de marzo, hasta bien entrado mayo, podemos disfrutar de uno de los espectáculos más bellos que nos ofrece el llamado bosque mediterráneo, que no es otro, que la floración de la Jara Pringosa, Cistus ladanifer. – Es entonces cuando las laderas y los valles más soleados se tiñen de blanco como si de repente, todo estuviera cubierto de nieve.

 

La Jara Pringosa fue utilizada en perfumería, extrayendo los aceites que le otorgan ese olor tan agradable que la caracterizan. – También ha sido una tradicional fuente de calor, piconeros y leñadores quemaban grandes haces de leña para la elaboración de carbón natural, que durante tantos años a nutrido los braseros que calentaban los gélidos inviernos mesetarios.

Muchos son los nombres comunes que recibe este miembro de la familia Cistus, puede incluso que cada pueblo la denomine de una forma distinta. Algunos de estos nombres son: jara blanca, jara negra, estepa blanca, hierba lobera, jara pringosa, jara del ládano, jara de la flor manchada, jara de las cinco llagas, jara de Sierra Morena, jara mora, rosa de la jara o jara manchega.