Después del invierno más seco que se tiene constancia, abril, tal y como se le esperaba, llegó cardado de lluvias. – No se pueden imaginar cómo ha cambiado el paisaje manchego en estas últimas semanas… -Al fin los agricultores pueden respirar tranquilos, y según parece, la cosecha de cereales no será tan mala como se anunciaba.
Los ciclos naturales también han acelerado su marcha. - Las perdices han comenzado la incubación, y en unos pocos días las veremos por los barbechos y los campos de liego con los pequeños perdigones. – Ayer, bien de mañana, me sorprendió esta, impertérrita, al borde mismo del camino.
La verdad es que estas recientes lluvias nos están aliviando...¡Menos mal!
ResponderEliminarBs
Benita