Bajo París, la ciudad de la luz, se esconde otra ciudad, mucho más oscura, sin demasiado “glamour”, donde ahora moran millones de esqueletos, restos de personas que hoy nadie recuerda.
Las Catacumbas parisinas, son en su origen viejas canteras romanas, ahora repletas de restos humanos procedentes de los distintos cementerios de la ciudad. Muchas leyendas e historias tenebrosas se han ido fraguando en este laberinto con el paso de los años. La parte visitable, sólo es una pequeña porción de la gran morgue que yace bajo la ciudad. Cientos de pasadizos se entrecruzan con el alcantarillado y con las posteriores infraestructuras del metro.
Si decide visitar el lugar ármese de valor y de paciencia… ¡ah!, no olvide llevar calzado cerrado, muchos de los túneles están embarrizados con el agua que la tierra rezuma y con las cenizas de los que allí se descomponen, poco a poco…
Aunque si quieren que les diga la verdad, lo que a mí me produjo verdadero miedo, fueron algunos de “los vivos” que visitaban el lugar y que fueron retenidos al final de la visita con las mochilas repletas de restos humanos…
Si decide visitar el lugar ármese de valor y de paciencia… ¡ah!, no olvide llevar calzado cerrado, muchos de los túneles están embarrizados con el agua que la tierra rezuma y con las cenizas de los que allí se descomponen, poco a poco…
Aunque si quieren que les diga la verdad, lo que a mí me produjo verdadero miedo, fueron algunos de “los vivos” que visitaban el lugar y que fueron retenidos al final de la visita con las mochilas repletas de restos humanos…
No sé si conoces A Capela dos Ossos en Evora, una pequeña iglesia construida con huesos humanos, tambíen muchas de las calaveras de las paredes tienen firmas en la frente de la gente que por allí ha ido pasando... sobre la puerta de entrada hay escrito: "los huesos que aquí estamos, a los vuestros esperamos...".
ResponderEliminarA mí también me dan más miedo los vivos que los muertos... muchísimo más.
Que buena entrada, tiene que ser un sitio impresionante.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con vosotros, en que son mucho más temibles algunos de los vivos :)
saludos.
Madre mia...como tienes valor de meterte en semejante lugar?? Que lo nuestro son los pajaritos que revolotean por las inmediaciones del Guadiana jejejejeje. Un abrazo y espero que te lo pasases bien en tu viaje a las profndidades de Paris.
ResponderEliminarPdt: Hecho en falta unas fotos del ganso del nilo que rondaba por el Peralbillo hace unos dias. Seguro que guardas algo jejejeje
El lugar es extremecedor,pero lo que cuentas de la gente con las mochilas con restos humanos eso es vergonzoso....yo no cojo un hueso ni loca!!!
ResponderEliminarBesos
- Macroinstantes - Me han hablado en varias ocasiones de esta capilla. No vayas a pensar que estos lugares son el primer objetivo de mis viajes, pero puestos a visitar... pues se les echa un vistazo...
ResponderEliminarAbrazos.
Gracias Ángel. Parece ser que es algo que se produce todos los días. Cuando yo terminé mi visita el montón de huesos incautado era ya sorprendente, todos huesos grandes. No quiero imaginar los pequeños huesecillos que habrán ido saliendo poco a poco de este lugar...
ResponderEliminarAbrazos.
Hola Daniel. Ya estoy de vuelta en casa. Ya sabes entre col y col una lechuga. Algo de aves, lugares, plantas y lo que se vaya poniendo...
ResponderEliminar¿El ganso del nilo?... hace meses que colgué que andaba por la zona... pero que poco caso me haces... ¡jo! jejejej
Abrazos.
http://unpaseomanchego.blogspot.com/search/label/Oca%20del%20Nilo
Pues ya ves Mª Angeles la sorpresa cuando abren las mochilas de los que iban delante de mí y aparecen los huesos sustraidos...
ResponderEliminarSupongo que tenemos la sociedad que nos merecemos...
Abrazos.
¡Es espeluznante!
ResponderEliminarVengo a tu blog buscando imágenes bonitas y...
¡Es escalofriante!
Y más escalofriante aún la leyenda que acompaña...uggh!
Benita
Llevas razón, a veces hay que temer más a los vivos que aquellos que yacen en lugares como ese y otros, puedo decir que me aterra la muerte, quizás hay quien piense ¿por qué? pues la respuesta es larga, cuando fui a vivir a París, trabajaba en una emisora, me invitaron a visitar ese lugar y de paso tenia que hacer una entrevista, je,je,je, cuando entre y vi aquello, se me erizaron los pelos, creo que tanto que notaron que me iba a dar algo, salí echando "virutas" nunca más he vuelto por el lugar. Felicidades por bajar y además por traerlo, pero me gustaba más las bellas mariposas, esto último es broma.
ResponderEliminarUn abrazo
Benita no deja de ser un monumento que aparece en varias guías. Sólo una muestra de lo que realmente somos: "Sueños por cumplir y huesos".
ResponderEliminarBesos.
Higorca cada vez que dejas entreveer algunos retazos de tu vida más me interesa...
ResponderEliminar¿Qué hace alguien como tú en un lugar como éste?... (con todo mi respeto... pero Herencia tampoco es que...)
Seguro que algún día tenemos la oportunidad de tomar una café...
Besos.